¿Cómo evitar caer en la "trampa de la eficiencia" en el trabajo?
Si por lo general sufres de ansiedad creo que está pregunta no va para ti, sin embargo, es una duda que le surge a las personas la mayoría del tiempo. Esa pregunta es ¿cuántas semanas vivirá una persona promedio?
La respuesta a esta maravillosa y tan aterradora pregunta es para una esperanza de vida de 80 años, serían unas 4000 semanas, hasta los centenarios sólo vivirán 5.200.
Ahora que sabes con exactitud (o casi con exactitud) cuánto tiempo vivirás te genera mucha incertidumbre, seguidamente de un profundo sentimiento de querer hacer mucho más con tu vida en el corto periodo de tiempo que queda en la tierra.
Pero espera, lo que intentamos acá es que no caigas en esa "trampa", sino todo lo contrario, sepas de que se trata y puedas combatirlo. Por eso mismo, el escritor en psicología Oliver Burkeman sostiene en su nuevo libro, "Cuatro mil semanas" que intentar realizar la mayor cantidad de tareas y "metas", solo generará a decepción e infelicidad. En su opinión, nos vendría mejor ir más lento, en lugar de acelerar, si queremos sacarle el máximo a nuestra corta esperanza de vida.
EL TIEMPO ES UN TIRANO Y NOSOTROS OBEDECEMOS
La ansiedad que nos genera el corto tiempo que nos queda en la tierra, y en qué lo gastamos, no es exclusiva de la actualidad. En el año 29 A.C el poeta romano Virgilio escribió "fugit inreparabile tempus" ("el tiempo vuela irrevocablemente") lo que expresa un poco de la ansiedad por el paso de los días. ¿Te suena familiar?
Sin embargo, Burkeman explicó que la preocupación particular del ser humano por el tiempo se acentuó mucho más cuando el reloj se volvió de uso cotidiano y las personas empezaron a tener rutinas muy marcadas, así como también horarios estrictos.
Todo gracias a la revolución industrial, puesto que antes de esto, las personas tenían tareas más sencillas. "Hay que ordeñar la vacas cuando necesitan ser ordeñadas, y no podías decidir de alguna manera hacer todo el ordeño de un mes en unos cuantos días", dice.
Con el paso de la revolución industrial las personas pasaron a prestarle mayor atención a la planificación y la creación de horarios estrictos, y a su vez, la producción fue monitoreada minuciosamente, lo que resulta en una presión para el trabajador y por ende, tratar de hacer más trabajo en el menor tiempo posible.
LA TRAMPA DE LA EFICIENCIA
Con el paso de los años la industria de autoayuda se ha enfocado en atender este tipo de ansiedades, asegurando que la principal herramienta para manejarlas es "la gestión eficiente del tiempo". Con esta herramienta es casi seguro que podrías cumplir casi cualquier tarea que se te cruce por el tiempo.
Pero Burkeman no piensa de esta manera. El describe la obsesión con la eficiencia y la productividad como una especie de "trampa", puesto que en ningún momento podrás huir de la sensación de que se podría estar haciendo más.
¿Cómo se traduce esto? Pues considera una meta básica, como optimizar tu correspondencia. Podrías, mágicamente, lograr responder todos y cada uno de tus correos logrando que tú bandeja se mantenga limpia, sin embargo, responder todos los mensajes significa que se van a generar más respuestas lo que, básicamente, resulta en una bandeja llena nuevamente.
¿Cómo podríamos escapar de esta 'trampa'? Burkeman piensa que nuestro implacable impulso de productividad es un intento inútil de escapar la cruda realidad de nuestras 4.000 semanas en la Tierra. Lo que queda al ser humano ante su inevitable final es aceptar la capacidad limitada de lograr todo lo que quisiéramos en la vida.
Este escritor nos recomienda:
limitar el número de objetivos que queremos alcanzar a la vez. intercambiar metas, naturalmente, a medida que tu vida progresa y adaptar cada una de esas metas con el tiempo que tienes, el espacio en tu agenda y poco a poco surgirán en ella lo que quieras o no realizar.
Autor: David Robson
BBC News Mundo
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