Ensayos clínicos para combatir la esclerosis múltiple: el ARNm va por el virus de Epstein-Barr
La esclerosis múltiple es una de las peores enfermedades que puede sufrir una persona, lamentablemente miles de personas en todo el mundo deben padecer de ella, deben padecer que es el propio sistema inmunitario el que ataca la envoltura de mielina que protege las neuronas y provoca que, sin esa protección, los impulsos nerviosos disminuyen progresivamente y acaban por desvanecerse, y lo peor de todo, que no hay forma de curarlo.
Ahora bien, sabemos que no existe una cura, pero la revista Science publicó un estudio con más de diez millones de participantes que aportan las primeras evidencias convincentes de que el virus de Epstein-Barr (VEB), el herpesvirus causante de la mononucleosis, está detrás de la enfermedad, el mundo biomédico saltó de alegría. Esto es básicamente un elemento central para conseguir una vacuna.
Por primera vez se puede dar como confirmada la hipótesis de que la infección por el virus de Epstein-Barr desencadena la esclerosis múltiple, confirmó la revista, pero ¿por qué? y pues la respuesta parece “sencilla”, casi todos los enfermos son 'seropositivos' en el virus a la hora de mostrar síntomas". Lo cual tampoco es una sorpresa porque el Epstein-Barr es uno de los más comunes y afecta a entre el 90 y el 95% de los adultos del mundo.
Asimismo, el estudio también concluyó una posible conexión causa-efecto. Es decir, que el riesgo de desarrollar esclerosis en individuos que no tenían el virus aumenta 32 veces tras infectarse. No obstante, ahora quedan muchas dudas encima de la mesa. Como los mismos investigadores escriben, "casi todos estamos infectados con el VEB, pero únicamente una pequeña fracción desarrolla Esclerosis Múltiple". Lo más probable es que existan otros factores que lleguen a desencadenar la enfermedad.
En búsqueda de la vacuna
El virus Epsteins-Barr se considera un virus no demasiado problemático básicamente porque no suele ser muy agresivo a nivel poblacional, pese a que las complicaciones de este incluyen la meningitis, la encefalitis o el síndrome de Guillain-Barré; estas suelen ser muy comunes, no existía urgencia por desarrollar una vacuna, en parte, por lo extendido del virus, al punto de estar casi normalizado.
Sin embargo, esto no quiere decir que no existan laboratorios que se encuentren investigando en dicha vacuna. Tal es el caso del laboratorio Moderna, el cual lleva tiempo trabajando en una. De hecho, hace solo unos días empezaba la Fase I del estudio en humanos. Cuando decíamos que la tecnología de ARNm podía cambiarlo todo, no estábamos exagerando: sus posibilidades son enormes.
Si, esto son avances gigantes y es muy probable que podamos sentirnos felices, no obstante, hay que tener algo claro: por sus características clínicas, ajustar la vacuna para la esclerosis va a ser largo y complejo. Pero el hecho de que tengamos la tecnología a punto para empezar ya a trabajar en ella es una noticia realmente impresionante.
Autor: Javier Jimémez