Reduciendo el gap de desarrollo
Las innovaciones tecnológicas han tenido un impacto significativo en el mundo, haciendo posible que los países salten los pasos que necesitan para llegar a un grado de desarrollo avanzado sin tener que recrear el mismo proceso. Esta es la razón por la cual este tipo de innovaciones son tan útiles para sociedades enteras.
La innovación puede hacer que países de bajos ingresos, con poca infraestructura, lleguen a niveles de desarrollo que son mucho más altos de lo que sus niveles de ingreso y su infraestructura tradicional podrían haber logrado.
Algunos ejemplos pueden ilustrar el potencial que genera la innovación:
- La banca móvil se ha utilizado en muchos países en desarrollo para reducir el número de personas no bancarizadas al permitirles acceder a cuentas bancarias con un simple teléfono.
- Se han instalado paneles solares en áreas remotas donde la electricidad es costosa o no está disponible, lo que permite a los usuarios obtener energía a un costo menor del que podrían obtener de otra manera. Esto también mejora la salud al proporcionar una mejor refrigeración para el almacenamiento de alimentos, lo que reduce los casos de intoxicación alimentaria debido a una manipulación inadecuada.
¿Tienen países no desarrollados la misma oportunidad que los países ricos para crear innovación en el sector privado y en el sector público?
Desde Building Up creemos firmemente que sí y que es el camino para reducir el gap de desarrollo. Innovaciones tecnológicas como la cobertura del Internet, dispositivos móviles usados para tomar fotos o videos y proteger a las personas contra el crimen, pueden ayudar a sociedades enteras al ser más fáciles de implementar y mejor adaptadas a los niveles de bajo ingreso. El acceso a la tecnología digital puede beneficiar en gran medida a los países menos desarrollados al reducir los costes y mejorar la eficiencia de los servicios públicos clave como la atención médica y la educación. Actualmente existe una gran brecha en el acceso a estos servicios así como a los recursos económicos y otras oportunidades. Una forma en la que esto se puede combatir es con innovaciones tecnológicas.
Las inversiones estratégicas en áreas como la educación, la ciencia e infraestructura digital son las semillas del desarrollo sostenible, en vez de un simple proceso lineal.
Estos recursos deben ser utilizados para poner en marcha los cambios que se necesitan para alcanzar un mayor nivel de desarrollo sostenible. El camino es claramente una ruta más complicada y no lineal, pero la meta del desarrollo sostenible es posiblemente lo más importante de nuestras vidas como seres humanos.
En las últimas dos décadas, hemos presenciado la irrupción de una serie de tecnologías disruptivas que han cambiado la forma en que vivimos, nos relacionamos y hacemos negocios. Por ejemplo, a fines de la década de 1990 y principios de la de 2000, las empresas comenzaron a utilizar la tecnología digital como las redes sociales con fines publicitarios; esto les permitió llegar a más personas que nunca sin gastar tanto dinero en métodos publicitarios tradicionales, como comerciales de televisión o anuncios en revistas. La popularidad de los dispositivos móviles también ha facilitado que las empresas se comuniquen con sus clientes al proporcionarles aplicaciones (apps) que les permiten a los usuarios interactuar directamente con las marcas en tiempo real; por ejemplo, Uber usa su aplicación como una plataforma para pasajeros que están buscando servicios de transporte, mientras que los restaurantes lo usan como una forma de registrar clientes que reservan en línea en lugar de llamar primero.
Este tipo de innovaciones ayudan a reducir los costes y al mismo tiempo aumentan la eficiencia porque permiten a las empresas llegar a los clientes directamente en lugar de a través de hacerlo mediante intermediarios.
Los países con una mejor infraestructura no son los únicos beneficiados en este proceso de avance tecnológico. Muchas de estas innovaciones tecnológicas pueden ayudar a sociedades enteras al ser de fácil implementación en países en vías de desarrollo.
La importancia de las innovaciones tecnológicas no puede ser subestimada ya que cambian las formas en que las personas interactúan entre sí y con su entorno.
Las innovaciones en tecnología abren nuevas oportunidades para que las personas se expresen y compartan información. También nos permiten aprender más sobre nuestro mundo y sus complejidades. Desde nuestra organización creemos que la innovación puede hacer que los países de bajos ingresos, con poca infraestructura, lleguen a niveles de desarrollo que son mucho más altos de lo que sus niveles de ingreso y su infraestructura tradicional podrían haber logrado. Los países en vías de desarrollo tienen la misma oportunidad que los países ricos para crear innovaciones en el sector privado y en el sector público. Las inversiones estratégicas en áreas como la educación, la ciencia e infraestructura digital son las semillas del desarrollo sostenible, en vez de un simple proceso lineal. Invitamos a que nos apoyes en nuestro programa de fomento de herramientas digitales básicas en países en vía de desarrollo así como cualquier iniciativa que pueda ayudarnos a reducir la brecha digital y de desarrollo.
Por Natacha Lander